martes, 9 de junio de 2020

La crisis del coronavirus obliga a pisar el acelerador en la transformación digital de la sociedad

Hace ya años que la sociedad avanza de forma decidida hacia la digitalización. El trabajo, el ocio, el consumo y muchos otros ámbitos de nuestra vida están cada vez más determinados por la tecnología.
Sin embargo, la crisis provocada por el COVID-19 ha hecho que la transformación digital deje de ser una posibilidad, un objetivo a alcanzar en un futuro cercano, para convertirse en una necesidad actual. De un día para otro, se ha podido constatar la importancia de la tecnología para mantener el mundo tal y como lo conocemos.

Pero el uso de la tecnología no depende únicamente del acceso a herramientas y dispositivos. Depende, también, de la educación y la formación digital de la sociedad. Hacen falta cada vez más profesionales con perfiles mixtos, que puedan reinventar los sectores en los que trabajan gracias a la innovación tecnológica.
Tecnología para hacer frente a la COVID-19
Los epidemiólogos y las autoridades sanitarias han señalado las vías principales para frenar la propagación de la enfermedad: mejorar el diagnóstico y aislar a la población, inicialmente, para luego establecer un distanciamiento social adecuado. Para todas ellas, resulta fundamental la tecnología.
El análisis de datos mediante tecnología de big data permite conocer la evolución de la pandemia y determinar las acciones que se deben seguir en cada territorio. Además, y gracias a numerosas plataformas para compartir datos y conocimientos, la información es accesible para diferentes actores alrededor de todo el globo.
Las tecnológicas están en movimiento. Google y Apple han desarrollado una API a partir de la cual las autoridades sanitarias de cada país podrán crear apps de rastreo de la enfermedad. IBM ha creado un consorcio junto con la Administración estadounidense y líderes de la industria para poner sus superordenadores a trabajar al servicio de los investigadores.

También ha hecho lo propio con herramientas de inteligencia artificial, al tiempo que ha facilitado el acceso a una versión gratuita de su Plataforma Genómica Funcional para ayudar en el hallazgo de fármacos efectivos.

En algunos países asiáticos se han desarrollado apps que controlan el movimiento de los ciudadanos e incluso detectan si han estado en contacto con alguna persona portadora del virus. En Singapur han ido un paso más allá para controlar la actividad de la población haciendo uso de la tecnología.

No hay comentarios:

Publicar un comentario